“Facilitación Gráfica es servir a un grupo escribiendo y dibujando su conversación en vivo y en gran tamaño para ayudarlos a realizar su trabajo.” Brandy Agerbeck, The Graphic Facilitator Guide.
Con esta metodología tan poderosa y útil las personas se sienten escuchadas, son parte del proceso y pueden ver y tocar el resultado de su trabajo (recordamos mejor lo que hemos creado).
Los estudios muestran que aprendemos más y mejor cuando acompañamos la información con elementos visuales, y esto sucede porque pensamos en imágenes (no solo en palabras, y definitivamente no en planillas de Excel o láminas de PowerPoint). La Facilitación Gráfica es una herramienta grandiosa para la planificación estratégica, para definir una visión, pensar colectivamente, resolver problemas y para usar en sesiones de coaching, entre otros usos.
¿Qué hace a un Facilitador Gráfico?
El Facilitador Gráfico, una persona que sabe escuchar, con fuertes y legibles destrezas caligráficas, perfecto deletreo de palabras (bueno… casi), un gran oficio para leer las dinámicas grupales, para usar el color, las líneas e iconos y para captar lo que se está diciendo, escuchando las ideas tal como se verbalizan y rápidamente plasmar su esencia en el papel. Usando las palabras de Brandy Agerbeck: El Facilitador Gráfico es la persona que mapea la reunión.
La principal habilidad de un Facilitador Gráfico no es dibujar (quizás sea la menos importante), sino escuchar (y hacerlo muy bien) y luego sintetizar, capturando primero las palabras que se han dicho y luego las imágenes. No hablamos mientras trabajamos y no necesitamos conocer la industria del cliente (un breve resumen del contenido antes de la reunión siempre ayuda, pero no es obligatorio).
La Facilitación Gráfica puede lograr que sus reuniones y talleres brillen, haciéndolos más poderosos y memorables, de maneras que jamás pensó que sería posible.
